Comer pollas.
Todo el rato.
Succionarlas.
Chuparlas.
Lamerlas.
Meterlas bien dentro de la boca.
Arañarlas con la lengua.
Mojarlas, bañarlas, chorrearlas.
Chorrearme yo.
Babas, labios, carne.
Cerrar los ojos.
No dar abasto.
Buscar como alimento.
Pelear por ellas.
Desencajarse.
Seguir comiendo.
Todo el rato.
Casi sin respirar.
Y de repente ser follada.
Por una, dos, tres...
Por un agujero.
Por otro.
Y seguir comiendo.
Y vuelta a empezar.
Y una, dos, tres...
Abrir las piernas.
Recibir una lengua.
Chorrear, chorrear, chorrear.
Y seguir comiendo.
Tragando.
Y de nuevo, ser follada.
Sin sentido.
Perdida y feliz.
Caliente, cachonda, mareada.
Corrida, jugosa, excitada.
Y ahora llena de leche,
follada, empapada.
Cansada.
Feliz.